El software médico, ideado por Miguel Ángel Ospino, combina textos, gráficos, fotografías e imágenes para permitirle al estudiante interactuar con la morfología del cuerpo humano.
El programa fue bautizado como BONEX3D y fue presentado en la Jornada Académica PISIS 2008, de la Unimag.
Según Ospino, estudiante de Ingeniería de Sistemas, el proyecto nació como un recurso didáctico e interactivo útil para conocer, estudiar y comprender, en segunda y tercera dimensiones, las teorías de morfología. Con el diseño de la herramienta tecnológica, los estudiantes y docentes de la Facultad de Ciencias de la Salud y de carreras afines podrán desarrollar mejor su proceso de enseñanza y aprendizaje.
"Este software tiene la particularidad de combinar texto, gráficos, fotografías e imágenes con el propósito de facilitar el estudio teórico-práctico de su área", dijo Ospino.
Trabajo en equipo
Para consolidar este proyecto, Miguel Ángel trabajó de la mano con un grupo de profesionales que aportaron sus conocimientos desde diferentes perspectivas.
El ingeniero de Sistemas Johan Alberto Robles se encargó de guiar el desarrollo del software con el fin de que su funcionamiento fuera de fácil manejo para todos los usuarios. Para lograrlo se basó en el lenguaje de modelado X3D o 3D Extensible, y VRML (Virtual Reality Modeling Language).
El odontólogo forense Everaldo Marcos Calderón Albus fue el encargado de los conceptos sobre medicina, morfología humana y algunas herramientas atractivas para el estudio de esta área.
De la empresa alemana Elsevier, encargada de desarrollar el atlas de anatomía humana Sobotta, se obtuvieron las imágenes que se registran en segunda dimensión.
Y Esteybi Federico Beleño Sampayo, estudiante del programa de cine y audiovisuales de la universidad, se encargó de la reportería gráfica que permitió dar textura en 3D a las fotografías.
La propuesta de Ospino es que la Universidad del Magdalena actualice este instrumento de enseñanza a través de las nuevas generaciones de las áreas de Ingeniería, Medicina y carreras afines.
El estudiante se comprometió a que a su salida de la universidad, dejaría la documentación técnica del software y los códigos de programación.
"Lo único que tendrían que hacer las personas interesadas en actualizar el software es agregarle más información médica e ingresarle las imágenes adecuadas para ilustrar todos los datos ahí publicados", puntualizó Ospino.
SANTA MARTA
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